Esas son las tres palabras que más escucho, digo y repito durante la última semana. Estoy cansada y reventada, la mudanza me está dando para el pelo de lo lindo, pero eso le pasa a todo aquel que se muda.
El pequeño se acaba de ir de mi cama, y es que se hace el enfermo para que yo le de mi medicina especial, que es leche caliente con un poco de vainilla. Como le ha gustado, pues dice que está muy malo y que quiere medicina y dormir en mi cama, como hace su hermano Mediano, el cual parece que tiene algo de garganta. Pues eso, que hoy, como otro día más lo he acostado ya, y me voy a dormir ya.
Otro día os cuento más cosas. Bueno, puedo decir que al parecer nos vamos el lunes, pero quien sabe, lo mismo no nos vamos...
Besos Rojos y los holgueranos que leen, que alguno será, que sonrían mucho, y si no lo consiguen que se acuerde de mi risa contagiosa, porque ahora que no estoy allí, solo os puedo hacer recordar. Un besazo a la familia del camión :)
La foto es una de Disney Land, que la decoración era genial, ademàs, hacia juego con mi indumentaria elegida.
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